Dios mío, Jesucristo: Te doy gracias por todos los beneficios que has dispensado en este día.recibe nuestro dolor y alegrías y mantén nuestras almas limpias de toda maldad.
Señor Jesús, que iluminas la noche y haces que después de las tinieblas amanezca nuevamente la luz, haz que, durante la noche que ahora comienza, nos veamos exentos de toda culpa y que, al clarear el nuevo día, podamos reunirnos otra vez en tu presencia para darte gracias nuevamente.
Que su Santa Madre, Virgen María nos una a todos bajo su manto, así sentirnos hermanos de un mismo Padre Dios.
Que la paz sea posible, en todos los corazones para poder trabajar mejor por tu Reino de Amor y de justicia.
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