Desde que tuvimos la primera noticia de la caída del niño Julen en el pozo la Diócesis de Málaga ha estado rezando por él y por su familia. Todos hemos seguido con atención los difíciles trabajos para su rescate.
Hoy, los feligreses de las parroquias de Totalán y El Palo y el mismo Obispado de Málaga quiere expresar su sentida condolencia a sus padres y a su familia. En estos días todos nos hemos sentido muy cercanos a ellos y hemos compartido la angustia y el dolor.
Los cristianos creemos en la Resurrección de Jesucristo; y por ello rezamos a Dios para que otorgue al pequeño Julen la Paz eterna y la Luz inmortal, que viva para siempre en el Señor.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Nota: solo los miembros de este blog pueden publicar comentarios.