El pasado 6 de diciembre la Familia Dominicana de Salamanca celebró una eucaristía en recuerdo de Sor Teresa Chikaba. La convocatoria, realizada por la Fraternidad laical de Salamanca, contó con la asistencia de frailes, monjas y laicos de la ciudad de Salamanca. Se trataba de recordar a esta figura singular de la Orden dominicana en la fecha de su fallecimiento.
Teresa Chikaba (c. 1676- 6 diciembre de 1748) nació en la actual Ghana, como tercera hija de un monarca local. Siendo niña fue apresada por comerciantes de seres humanos que la vendieron como esclava. Llegada a España estuvo al servicio de la Marquesa de Mancera. Fallecida su señora, dispuso en su testamento que se le concediera la libertad. Teresa vio entonces que podría realizarse la gran aspiración de su vida: ingresar en un convento. Tras ser rechazada en varios monasterios precisamente por el color de su piel fue acogida en el Monasterio de la Penitencia de las Dominicas en Salamanca. Allí pasó el resto de sus días, sin ser oficialmente monja de la comunidad pero consagrándose al Señor con votos privados. Su vida destacó por sus virtudes cristianas y su amor a los más necesitados a los que socorría desde la portería del convento. Está abierto el proceso de beatificación.
La fraternidad laical de Salamanca quiere recordar todos los 6 de diciembre a esta mujer y al compromiso que mantuvo con el evangelio. En la celebración se proyectó un video de su vida y se cantó un himno compuesto por Amaparo Sanz, autora de un libro infantil sobre Teresa Chikaba.
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